Los gatos son amantes del calor. Les encanta tumbarse al sol, en el radiador y junto a la chimenea. ¿No te has preguntado alguna vez si no se achicharrará? Pero ellos son felices en esas zonas calentitas y, sobre todo en invierno, pueden pasar horas y horas sin moverse de ahí. Por eso una hamaca de radiador es una idea genial para regalar a tu gato.
Cama de radiador
Esta cama de radiador es el complemento perfecto para nuestros felinos y aunque, como siempre ocurre, hay gatos a los que no les gusta, en general suele ser un éxito rotundo.
Está formada por una estructura metálica, que le da la forma y permite sujetarla en el radiador, y una funda de tacto suave, tipo peluche, que será donde nuestro gato se tumbe como si de una hamaca se tratase.
Cuenta con dos ganchos metálicos que hacen que sea muy sencillo colgarla del radiador sin necesidad de tener que adaptarlo o hacer agujeros y la estructura es muy estable haciendo que puedan utilizarla tanto gatos pequeños como grandes.
Es totalmente desenfundable gracias a una cremallera situada en la parte inferior, de tal manera que no molesta al gato al tumbarse, y así permite que podamos lavarla en la lavadora.
Otros modelos
Además de esta cama tipo hamaca, debido a su éxito han ido surgiendo muchos más modelos para adaptarse a las preferencias de cada gato.
Cesta de radiador
Hay camas de radiador tipo cesta con los bordes más altos para que el gato se sienta más protegido. Antes de elegir este tipo de cama debemos tener en cuenta que es posible que sea un poco más difícil acceder que a la anterior.
Si tenemos gatos mayores, muy pequeños o con problemas articulares es probable que debamos colocar al lado alguna ayuda (cómo un taburete o un rascador) para que puedan subir.
Tubo de radiador
Si a tu gato le gusta dormir en lugares cubiertos como cajas, debajo de la cama, en cuevas… Esta es una muy buena idea porque estos tubos quedan mucho más cubiertos.
Los peligros del radiador
Cómo hemos comentado, los gatos aman el calor y a la mayoría les encanta subirse a los radiadores. Esto entraña un peligro, los pequeños huecos que quedan entre las piezas del radiador son una de las causas principales de accidentes de gatos que viven dentro de casa.
Por suerte, la solución a este problema es sencilla. Podemos colocar unos perfiles cortados a la medida tapando estos agujeros y de esa forma no se podrán enganchar con los dedos ahí. Puede parecer una tonteria, pero muchos gatos han sufrido roturas e incluso la amputación de algún dedo por quedarse colgando del radiador.