Existen muchos mitos sobre la esterilización de nuestras mascotas que están muy extendidos por simple desconocimiento del tema. La esterilización, además de una decisión responsable que nos ahorrará sustos y camadas indeseadas, evitara a nuestros peludos muchos problemas de salud.
Nuestras mascotas no son como nosotros
Muchos propietarios ven la esterilización como algo negativo porque vemos a nuestros perros como a nosotros, pero para ellos el sexo es un comportamiento necesario para la supervivencia de la especie y lo hacen con la única finalidad de tener crías. Para ellos, cada época de celo (sean hembras o machos) supone un estrés constante.
Además no es cierto que necesiten criar una vez en la vida. Esta muy generalizada la creencia de que si no lo hacen aumenta la posibilidad de tumores, pero la única manera de disminuir las probabilidades de que los sufran es esterilizando.
Un cachorro de tu perro, no es tu perro
También está muy extendida la costumbre de no esterilizar por si en un futuro se quiere un hijo de tu mascota, pero no nos damos cuenta de que para ello nuestro perro va a tener otras tantas crías que no sabremos como acabarán. Por mucho que las quiera un vecino, un amigo o un conocido esa persona las puede abandonar, maltratar o hacerle llevar una vida que no se merece.
Además, por mucho que tengamos una cría de nuestra mascota no va a ser como ella. No vamos a conocer su carácter hasta que no sea un adulto. Puede que nuestra mascota tenga un comportamiento buenísimo y sus crías son un torbellino. Y si no que se lo digan a los adoptantes de las hijas de Lucca 🙂
¿Y si mi perro engorda?
Otro mito es que los perros esterilizados engordan. Esto NO es así. Lucca esta esterilizada y sigue teniendo un cuerpo de infarto.
Si que es cierto que al extirpar los órganos tanto en machos como en hembras se produce un cambio hormonal que puede afectar a la actividad y al metabolismo del perro, de igual manera que puede haber perros mas propensos al sedentarismo o a la obesidad desde que nacen, pero esto tiene una fácil solución: Actividad física y buena alimentación.
Y no nos echemos las manos a la cabeza porque tengamos que sacar a nuestro perro a dar buenos paseos para que se mantenga activo, si no pensabas hacerlo ¿Por qué decidiste adoptar un perro?
Ayuda a la salud de tu perro
La esterilización además evita muchos problemas de salud a nuestros peludos:
Hembras
Evitar infecciones uterinas. No es algo raro, Lucca tuvo que ser esterilizada de urgencia después del parto por esta razón.- Evitar cáncer de mama. Una de cada cuatro perras no esterilizada tiene quistes en las mamas, de los cuales el 50% suelen ser malignos.
- Evitar quistes en los ovarios
- Evitan embarazos psicológicos. Estos son muy habituales y hacen que nuestra perra lo pase mal y que, al producir leche, pueda llegar a sufrir mastitis.
- No tendrá el celo
Machos
- Prevención de cáncer de testículos y problemas de próstata. Estas enfermedades son muy habituales en perros mayores no castrados.
- Evitar escapes con el riesgo que estos suponen (perdida del perro, atropellos, robos, etc.)
Evita embarazos indeseados
Si tu perra no esta esterilizada, por muy obediente que sea, puede que un día se despiste o se escape y venga con una sorpresita a casa. En canso de que tengas un macho estos tienden a escaparse cuando hay alguna perra en celo por los alrededores con el riesgo de dejarla preñada.
Si esto llega a pasar lo mas probable es que alguno de esos cachorros acabe abandonado, maltratado o malviviendo. Los cachorros son muy bonitos, pero luego crecen. Las familias se cansan de ellos o no pueden mantenerlos y los dejan en la calle ¿De verdad queremos eso para los hijos de nuestros perros?
Lo mejor para evitarlo es esterilizar a nuestra mascota y si en un futuro queremos aumentar la familia con otro peludo, no te preocupes, las protectoras están llenas de perros de todos los tamaños y edades para adoptar, seguro que encuentras al amigo perfecto en una de ellas.